
Estoy de festejo. Cumplo tres años de publicar cada semana en este blog. 160 post que rondan las 72,00 palabras escritas, casi un libro. Algunas muy profundas, muchas otras triviales y unas cuantas divertidas. Te confieso que aunque a veces me desanimaba seguí escribiendo por mi compromiso conmigo
Quizá otros blogs, tras tantas publicaciones, se hayan convertido en hits que lee mucha gente, no es el caso de este. Acá el número de visitas es conservador pero constante. A pesar de que algunas publicaciones tienen sólo una decena de lecturas yo sigo escribiendo cada semana.
Además del disfrute que me da este ejercicio de escritura personal lo que me hace continuar con él es mi compromiso conmigo.
Los cincuentas me han traído madurez, aquí te conté de ello: Hoy cumplo 50. Sé que esta no es garantía sólo por el paso del tiempo, que le he invertido a ello y que uno de regalos más grandes que esta me ha dado ha sido descubrir que el compromiso más grande es con uno mismo.
Lo considero como un signo de madurez porque muchos años me pase cumpliéndoles a otros, incluso aunque en ocasiones atentara contra mí. Ni cuenta me daba, pero era una forma inconsciente de decirme que los otros estaban antes que yo.
No podría decirte que esto sucedió a partir de determinado evento o descubrimiento. Creo que ha sido una consecuencia de trabajar en la relación conmigo, al convertirme en mi mejor compañera de viaje es común que cumpla mis compromisos conmigo.
Cumplirme a mí no a los demás.
No porque es obligación o porque tengo, es porque quiero y me tengo la confianza en que lo voy a hacer.
En estas semanas al menos dos personas me expresaron sus conflictos para cumplirse con los compromisos que se hacen. A ambas las apoyé desde mi mirada de Coach y creo que lo único que me falto decirles es que quizás es buen momento para revisar la relación con ellas, que parte del trabajo tocaría en ese terreno.
No cumplirnos nos impacta en la confianza, además de que de tanto no hacerlo el cerebro ya no nos cree nada y cuando dices que vas a hacer, este ya no te cree y actúa en consecuencia.
Si es tu caso, te sugiero que empieces por recuperar tu confianza cumpliéndote en pequeñas acciones, esas que no hay garantía de fallar. Como cualquier otra relación la confianza se recupera con evidencias de cumplimiento de acuerdos.
La belleza de esto es que se hace extensivo a otros de forma armoniosa, no como me pasaba antes a mí. No es casualidad, las relaciones con otros es un reflejo de la forma en que te llevas contigo.
Así que esta semana no sólo celebro el tercer año del blog, también celebro mi compromiso conmigo que me genera una confianza tal en mí que me permite creer que soy capaz de realizar todo lo que me proponga.
¿Y si te cumples?
¿Y si…sí?
PD: Si algo de algún post te ha resonado déjame algún comentario o escríbeme a adrix@coachadrix.com me encantará saber de tu historia.
Y todo buen festejo tiene regalos, el mío para ti es una sesión en línea de 30-45 minutos para evaluar tu nivel de Gozo en el Gozómetro, si te animas aquí el link para reservar tu lugar.
La semana pasada, en un vídeo más del serial “El Gozo en tiempos adversos” platiqué de la importancia de los pensamientos para seguir adelante. Te lo comparto:
"5 bloqueos que no te permiten reinventarte profesionalmente cuando estás por llegar a los 50"
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