La vida no está en pausa

El haberla celebrado ajustándonos a las circunstancias me mostró una vez más que la vida en esta cuarentena no está en pausa, la forma en la que estábamos viviendo fue la que se puso en pausa y quizá hasta en punto final, es posible que esa normalidad, a la que estábamos acostumbrados, ya nunca sea igual.